Los boletines Isalem fueron escritos por Kabaleb a partir del año 1978, con el objetivo de transmitir ciertas informaciones complementarias a su obra y para contestar a las preguntas que ésta iba suscitando.
Redactó 8 y hemos querido rescatarlos porque, aunque hayan pasado 30 años, contienen informaciones que todavía son actuales y, además, permiten seguir la cronología de su obra.
Es probable que cuando hayamos avanzado en la construcción de este blog y de la página web de Kabaleb, generemos nuevos boletines Isalem con una perspectiva distinta y otra visión de la obra. Recuerdo a los navegantes que nada de lo escrito pretende ser dogmático y que sólo son puntos de partida, cuya finalidad es generar reflexiones. ¡Qué los disfrutéis! ...
Objetivo nº 1: Cambiar el Mundo
Hemos recibido numerosas cartas de personas que empezaban diciendo que algo en su interior les empujaba a realizar "algo importante", pero no sabían ni de qué forma hacerlo ni en qué podía consistir esa misión. Algunas de esas personas eran jovencísimas, adolescentes, y en ellos encontramos una fuerza, una determinación, un afán de conocimientos, que permiten desatar todos los entusiasmos. Sí, tenemos que hacer algo importante, es urgente que lo hagamos, porque el mundo no puede soportar ya más el peso que transporta.
Esta es la razón por la cual hemos creado la ETU. Estas siglas representan la creencia en una realidad superior que la adquirida mediante la experiencia de los sentidos o una clase superior de conocimiento que el logrado por la razón. Y esta corriente esotérica busca los elegidos, es decir, aquellos llamados por Dios desde sus comunidades de origen para formar una nueva y más profunda comunidad.
La ETU tiene que ser el vehículo de una acción. No podemos vivir la espiritualidad de una manera pasiva. Es preciso que nos fijemos el objetivo de cambiar el mundo, cambiar la sociedad, la forma de vivir, cambiar sobre todo los valores (falsos) sobre los que esta sociedad se asienta. Pero debemos tener la clara conciencia de que nada de esto cambiará si nos limitamos a pronunciar discursos, a escribir alegatos, a predicar y difundir un saber teórico. Es en nosotros mismos que el mundo debe empezar a cambiar, ya que todo seguirá igual si no somos capaces de predicar con el ejemplo.
La tarea no es fácil, porque todo se encuentra tan maleado, todos los valores eternos están tan asombrosamente alterados que el error aparece a menudo bajo los ropajes del bien, y el bien con los disfraces del error.
¿Dónde está el Bien? ¿Dónde está el error? Desde aquí y ahora mismo empezaremos a levantar el repertorio de lo uno y lo otro. Y para empezar, quisiéramos dirigirnos en particular a los jóvenes, a esos jóvenes que nos escriben. Quiero dirigirme especialmente a ellos, porque se encuentran en una edad en la que aún no han establecido compromisos, pactos, consensos con un mundo que marcha peligrosamente fuera de la Ley, como un auténtico forajido. Son numerosos los que han contraído tantas responsabilidades que los atan a una situación, quizá injusta, que si se liberaran de ella cometerían una injusticia aún mayor, porque todo el tinglado de su existencia está montado alrededor de su error. Los jóvenes tienen las manos mucho más libres y les es mucho más fácil decir NO en un momento dado.
La primera tarea de un adolescente, consiste en vivir armoniosamente con sus padres. Los padres se encuentran a otro nivel generacional y simbolizan, para los hijos, el nivel superior espiritual. No se trata aquí de que los padres sean entidades más espiritualizadas que los hijos (a menudo la verdad es lo contrario), pero representan para los hijos su estado de relación con la espiritualidad, de manera que la discordia entre ellos significará que esa discordia existe igualmente entre el hijo y el Padre Divino o fuente primordial de vida.
Así pues, los hijos que dicen "No me entiendo con mis padres", "mis padres no me comprenden", etc. significa que existe un mal entendimiento con la divinidad y que sólo podrán conectar con las fuerzas espirituales a través de circunstancias dramáticas o difíciles; mientras que si hay feeling, ello será indicio de que la conexión con la espiritualidad vendrá de una manera natural y armoniosa.
Muchas personas llegan a la espiritualidad por caminos dramáticos después de ser objeto de agresiones, privaciones de libertad, amenazas, enfermedades y mil avatares. Estos itinerarios están ciertamente marcados en sus mapas del cielo por la posición de un Sol mal aspectado, pero muchos de esos dramas podrían ser evitados, si inicialmente el individuo realizara un esfuerzo para comprender y amar al padre físico, que es el representante de esa espiritualidad inscrita en su vida con letras de sangre.
A veces es difícil amar a los padres porque su imagen lleva el estigma de errores, de pasiones, de violencias. Pero el hijo que es víctima de esta situación debe saber que si esto es así para él, no se debe a una casualidad, sino al hecho de que en anteriores encarnaciones ha utilizado sus poderes espirituales de una manera arbitraria y el modo de ser de su padre le anuncia que le espera una vida en la que él puede ser víctima de la arbitrariedad. Si a través de sus padres, él busca la manera de superar lo arbitrario, de neutralizar esa fuerza hostil y crear la armonía ahí donde no la hay; si a pesar del modo de ser de sus padres él consigue establecer esa armonía, ello supondrá haber conjurado los peligros de una vida difícil, de modo que las buenas relaciones entre padres e hijos son la mejor garantía de estabilidad y felicidad en su ulterior existencia.
Esto es así porque el símbolo que los padres representan, pasa a encarnarse en el marido o en la esposa, cuando el hijo se casa y funda su hogar; y en la vida profesional, se encarna igualmente en el patrón, y en la vida civil y política encontramos al símbolo encarnado de nuevo en la autoridad administrativa, pudiendo así establecerse una Ley que podríamos enunciar de esta forma: Según sean tus relaciones con tus padres, así serán tus relaciones con el cónyuge, con los superiores jerárquicos, con las autoridades civiles y con Dios.
{mosimage}No es pues casual que en las leyes que Jehová entregó a Moisés, después de los preceptos relativos a las relaciones del hombre con Dios, viniera inmediatamente el precepto de honrar padre y madre. El mismo precepto se encuentra en la Escuela Iniciática de Pitágoras, ocupando el mismo rango y dice: "Se buen hijo, justo hermano, tierno esposo y buen padre. Como amigo elige a quien lo sea también en la virtud".
Entenderse con los padres es la primera dificultad a vencer en la vida de un individuo y del buen o mal resultado de esa prueba inicial dependerá gran parte del futuro de la persona. No se trata pues de saber quien lleva la razón en la conflictividad, sino de detectar la capacidad de maniobra del individuo para convertir la adversidad en circunstancia propicia. Los padres constituirán el primer terreno de prueba.
Mejorar las relaciones con los padres debería ser, para todos, la consigna a seguir.
PREGUNTAS Y RESPUESTAS
- Significado del nombre KABALEB
Son numerosas las personas que han preguntado, y es natural, cual es el significado del nombre de Kabaleb. Está compuesto de cinco letras del código hebraico y son las siguientes: Khaf, Aleph, Beith, Lamed, Beith. No daré la descripción detallada de lo que cada una de esas letras significan (porque ya aparece en el C. de I. a la astrología y el tarot y en el Estudio Cabalístico del nombre de los genios), ni de las etapas que representan, pero en síntesis el mensaje de ese nombre puede expresarse así:
"Las energías primordiales se condensan para crear una voluntad eficiente y convertirla en fuerza generadora que ha de fermentar en el alma humana, arrancar de ella el hervor que le permitirá fundirse con el Todo y convertirse en un centro de Vida". Si esquematizamos aún más el mensaje, podemos decir: "El que condensa la luz y la proyecta sobre las almas, a fin de despertar en ellas sus poderes dormidos y hacerlas centros de creación".
Ese es justamente nuestro objetivo al iniciar esta Obra.
- ¿Por qué es necesario un nombre sagrado?
Conviene que cada uno de vosotros adopte un nombre sagrado (que podéis encontrar a través de la meditación). La razón de esa conveniencia es que todos estamos en un mundo de dispersión y resulta difícil concentrarnos. Procuremos deslizarnos por este mundo sin manchar la vestidura de nuestra personalidad, pero si ésta inevitablemente se mancha, conviene que tengamos otra que permanezca pura, por encima de lo profano.
A esa otra personalidad debemos darle un nombre distinto, de modo que si en el bregar cotidiano nos llamamos Carmen o Javier para desarrollar nuestra personalidad profana, que nos sea posible, en un momento dado, despojarnos de esos nombres para conectar con nuestra personalidad sagrada, sellando así un compromiso con nuestro Ego Superior.
Ese nombre sagrado, quizá solo viva cinco minutos en una jornada, pero si ya es dueño de cinco minutos al día, si ha establecido una cabeza de puente en nuestra personalidad profana, ese Yo sagrado ya se encargará de ir ensanchando su espacio diario, minuto a minuto, y un día acabará arrojando a su contrapartida profana. Cuando esto suceda, nos habremos realizado espiritualmente y seremos columnas que sostienen el universo.
- ¿Tenéis pruebas de que los luciferes se encuentran alojados en nuestra columna vertebral?
Esta es una de las preguntas que nos ha sido formulada, a raíz de nuestra tercera lección de Cosmogonía. Estamos en un mundo en que se exigen pruebas materiales para creer y los condicionamientos mentales de las personas los llevan a aceptar sólo lo que es palpable. Pero la prueba material solo sirve para demostrar algo que también es material. Hay pruebas de que América existe, de que no es una fantasía creada por un poeta; pruebas de que el hombre ha pisado la Luna; Pruebas que el Sol calienta, de que la Ley de la gravedad funciona en la forma prevista. Las pruebas científicas nos sirven para conocer cada vez más a fondo el mundo ma-terial en el cual estamos viviendo. Pero si nos despegamos de este mundo y nos interesamos por la esencia que lo ha hecho posible, las pruebas materiales desaparecen y solo existe la prueba individual e intransferible. El que ha visto la Luz, el que ha tenido experiencias en otros mundos u otras dimensiones, ya nada ni nadie podrá convencerlo de que sus vivencias son alucinaciones; pero al mismo tiempo tampoco él podrá convencer a los que le rodean de que lo que ha visto es verdadero. Será una verdad para ellos cuando puedan verlo y tocarlo, no antes.
Las religiones exotéricas ofrecen el camino de la fe para llegar a esas evidencias interiores. Las escuelas iniciáticas (y nosotros somos la puerta que conduce a ellas) ofrecen el camino de la razón, que permite llegar a la evidencia interior. Existe una organización cósmica, del mismo modo que, a nivel humano, existe una organización social, con sus reyes, sus príncipes, sus gobernadores, sus directores generales, ayudantes y cada grupo de jerarquías ocupa un puesto y tiene una misión muy precisa.
El que los luciferes operen a través de nuestra columna vertebral, no es sólo un conocimiento que nos ha llegado a través de las escuelas iniciáticas de una tradición más que milenaria, y si citamos la antigüedad del conocimiento es porqué una verdad que atraviese la barrera de los siglos y de los milenios, permaneciendo viva, es que auténticamente es una verdad. Un error puede durar años, décadas, pero el tiempo irá echándole tierra encima y finalmente morirá. Sólo la verdad permanece. Pero es que además, los iniciados videntes han visto con los ojos del espíritu a los Luciferes actuando a través de la columna vertebral y todos los que alcancen la videncia podrán verlos.
Su misión es potenciar al máximo nuestros deseos. Ellos no tienen poderes para obligarnos a que hagamos esto o aquello, sino que, cuando nace en nosotros un deseo, ellos ponen a nuestra disposición sus oficinas, sus ejecutivos, sus secretariados, para dar a ese deseo la máxima extensión posible y propiciar su realización. Para ese fin, uno de los Luciferes tiene en nuestra columna vertebral su cuartel general y desde allí envía partes a su organización para que su "protegido" (nosotros) pueda realizar el deseo. Gracias a la ayuda de los Luciferes hemos quemado etapas, pero esa aceleración nos ha valido infinitos sufrimientos.
- Si ya hay un infierno, ¿por qué además tiene que haber karma?
Esta pregunta ha sido formulada por más de un consultante y debemos precisar que en el "Infierno" se borra un error, pero no se exime de la responsabilidad en que el individuo haya incurrido. En la vida real tenemos un ejemplo claro del problema: Un hombre mata a otro, la policía lo detiene, es juzgado y condenado a veinte años de cárcel. El individuo ya ha pagado por su crimen y ha podido arrepentirse de haberlo cometido. Sale de la cárcel sin culpa. Pero ¿y la familia del muerto? ¿Cuáles han sido las repercusiones de esta muerte en su vivir cotidiano? Si tenía hijos menores, como se han desenvuelto sin padre? Es evidente que la cárcel puede haber cambiado al individuo, pero lo que no ha cambiado es la situación que creó su acto criminal.
En el Infierno se restituye al individuo el dolor que causó, no sólo a su víctima, sino a todos sus familiares y el alma sale con la conciencia de que no debe atentar contra la vida nunca más. Pero el infierno no lo desconecta de las personas que el hombre ató a su vida con su gesto criminal, de modo que en su próximo retorno a la Tierra, se encontrará con su muerto, con la viuda y los hijos de éste. Posiblemente el muerto se convierta en su hijo, ya que con esa lógica implacable que es ley en el universo, si le ha quitado la vida, se la tendrá que restituir.
Aunque la víctima y el verdugo no tendrán conciencia de la relación que ha existido entre ellos en la pasada vida, si sentirán oscuramente la enemistad que los condujo al drama, y la vida de familia no será muy efusiva, que digamos. Si a la viuda y a los hijos los privó de recursos, en la nueva vida tendrá que velar sobre ellos y quizá también se conviertan en familiares. Pero el objetivo supremo, que hace que aquellos que se odiaron se encuentren atados por lazos familiares, es conseguir que entre ellos estalle el Amor. Si a pesar de todas estas precauciones, el espíritu de venganza de la antigua víctima persiste, aquel que dio muerte pasará por el trance de morir y sólo el perdón de esa exvíctima, convertida en familiar, lo librará de esta suerte. Puede ocurrir también que la providencia intervenga a su favor, si ha comprendido su error y su comportamiento ha sido ejemplar, librándolo de los furores de la venganza.
Podemos decir pues, resumiendo, que el Infierno borra la culpa, pero el karma sitúa al individuo en la posición del "otro", a fin de que se dé cuenta de como ruedan las cosas cuando un disparo pone fin a nuestra vida.
Conviene pues no desatar nuestros odios ni hacia las personas ni hacia las cosas, para no convertirnos un día en aquello que odiamos.
- ¿Cómo aumentar el nivel de conciencia?
Es una pregunta que nos formulan muy a menudo nuestros impacientes estudiantes. Una vez más insistimos sobre los grandes beneficios que pueden obtenerse con la meditación al amanecer. En las dos primeras horas de luz solar, se encuentran en activo las energías que emanan del signo de Aries. Aries es la puerta a través de la cual Dios comunica con el hombre y es en esas dos primeras horas que esa comunicación se establece. No se trata pues de hacerse escuchar por las jerarquías espirituales, sino de prestar oído a la voz del cielo.
Antes de proceder a la meditación sobre un tema preciso, recomendamos que se deje la mente en blanco, después de haber pedido misión para la jornada. Haciendo esto, los más sensibles notarán que el mensaje se imprime en su mente con toda claridad. Puede tratarse de algo sublime y trascendente, pero también de un mandato meramente profano, como hacer un favor, reconciliarse con alguien, tratar mejor a un familiar, visitar a un enfermo... Es importante cumplir con la misión encomendada, porque la realización del encargo desbloqueará sin duda mecanismos psíquicos que nos impedían avanzar.
Si el mensaje no aparece con toda nitidez, es preciso proceder a la meditación de un tema que nosotros mismos propondremos. Antes de empezar la meditación se tendrá pues preparado ese tema. Tiene que ser algo que lo veáis claro, algo que os preocupa y de difícil solución. Decidle mentalmente al Eterno: "Eterno, envíame tus agentes especializados para que me iluminen sobre este enigma que no consigo descifrar". Empezad entonces la meditación, buscando analogías, viendo como se soluciona algo parecido a lo que os inquieta y la solución aparecerá en vuestra mente con toda claridad.
- Mejoran los enfermos
Algunas de las personas por las que estamos rezando nos han comunicado su franca mejoría, incluso una de ellas, aquejada por un mal que los médicos consideraban incurable. Algunos de los sanadores anónimos que rezan por ellas nos han dicho igualmente con cuanto ardor y con cuanto Amor lo hacen. Que no les quepa la menor duda de que ese Amor se transforma en fuerza curativa y que da en la diana del objetivo que todos nos proponemos. Es enorme la cantidad de conocimientos que pueden penetrar en nosotros por vía intelectual, pero mucho mayor es la masa de conocimientos que se nos infunden cuando somos capaces de dar nuestra propia esencia para que otros, desconocidos, puedan recuperar la salud.
- Las incógnitas que plantea la enseñanza
Cuando se aborda el estudio de la construcción del universo, cada paso genera sus incógnitas y es natural que el estudiante formule preguntas sobre este y aquel punto que aparecen oscuros. Pero si tenéis un poco de paciencia, veréis como la enseñanza va respondiendo a ellas en su sucesivo desarrollo.
Isalem 1 (cábala)
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Isalem